Hay dos grandes pasiones en Jalisco. Por un lado está el futbol con sus equipos de primera división y por el otro están los Charros de Jalisco, el hijo pródigo del béisbol que ha logrado convencer a propios y extraños. Aquí te diremos por qué.
Desplázate al nororiente de la ciudad. Después de andar algunas cuadras desde el centro te encontrarás en la antesala del estadio de los Charros de Jalisco, equipo de béisbol de la Liga Mexicana del Pacífico. Adéntrate por Blvd. Panamericano, verás la gran composición metálica y blanca que alberga los encuentros del equipo.
Es un paraíso para los amantes del rey de los deportes, donde cientos de jaliscienses se unen al unísono para vitorear a sus ídolos, quienes en enero de 2019 fueron campeones de la Liga Mexicana del Pacífico por primera vez en su historia. Si no tienes la oportunidad de asistir a un encuentro, puedes pasar por la zona y seguramente alguno de los amables vigilantes te permitirá pasar hasta el túnel de entrada.
Para un día perfecto de eventos, A dos cuadras encontrarás el famoso Auditorio Telmex. En esa misma zona encontrarás diversos lugares para degustar alimentos, o restaurantes más amplios e independientes como el restaurante Puerta del Mar.
La arquitectura no tiene pierde. Observa el gran diamante de los Charros. Todo está en perfecto orden. Maravíllate con sus más de 13 mil butacas recién remodeladas y mira al cielo, verás la estructura blanca que simula una nube protectora.